Regalos
Me gusta regalar. A veces es un defecto; a veces una gran virtud.
Pero a mí me gusta regalar, aunque me freno. No regalo todo lo que me gustaría (y tengo mis buenas razones)... Me pasa que voy por la calle y veo cosas que sé que les encantarían a amigos/rollos/familiares/colegas/conocidos y claro, me apetece darles una sorpresa (me encantan las caras de ilusión y la sonrisa, ESA sonrisa).
Sobre todo me pasa cuando les veo tristes... entonces me puede todo... podría parar el mundo para que sonrieran y esto es precioso cuando se trata de un amigo (aunque por más que hagas si está triste no estará feliz) y agobiante en cualquier otro caso (una tía que no conoces de nada... ¡qué leches le vas a dar!). Por eso, cada vez más, me inclino por los pequeños gestos... esos que agradecen de verdad, que se preocupan de verdad; en definitiva, que SON de verdad.
Un viejo rollo anda triste por una mujer y sé que el dolor enseña, pero el instinto de madre que tengo me pide que vaya a arroparle (no, lo que él opine no importa) y mi yo (yo y mi yo y mi superyo) dice que nanai de la china... intentar animarle sí... pero no puedo quitarle el dolor. Lo peor de todo es que es buen tío, es muy buen tío y yo le quiero un montón, pero creo que él no sabe ninguna de las tres cosas...
La imagen (preciosa por cierto) fue vista en Foto Dani
Sobre todo me pasa cuando les veo tristes... entonces me puede todo... podría parar el mundo para que sonrieran y esto es precioso cuando se trata de un amigo (aunque por más que hagas si está triste no estará feliz) y agobiante en cualquier otro caso (una tía que no conoces de nada... ¡qué leches le vas a dar!). Por eso, cada vez más, me inclino por los pequeños gestos... esos que agradecen de verdad, que se preocupan de verdad; en definitiva, que SON de verdad.
Un viejo rollo anda triste por una mujer y sé que el dolor enseña, pero el instinto de madre que tengo me pide que vaya a arroparle (no, lo que él opine no importa) y mi yo (yo y mi yo y mi superyo) dice que nanai de la china... intentar animarle sí... pero no puedo quitarle el dolor. Lo peor de todo es que es buen tío, es muy buen tío y yo le quiero un montón, pero creo que él no sabe ninguna de las tres cosas...
La imagen (preciosa por cierto) fue vista en Foto Dani
2 comentarios:
A veces alguien te sonríe en la calle y te alegra la vida... yo creo que el gesto anónimo es todavía más bonito :-)
Y estamos de acuerdo, sí señora...
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