1/17/2010

"...la diferencia entre una señora y una florista
no reside en cómo se comporten,
sino en cómo se las trata. Yo seré
siempre una florista para el profesor Higgins,
porque él siempre me trata como a una florista, y
así siempre lo hará;
pero sé que puedo ser una señora
para usted porque usted siempre me trata
como a una señora y siempre lo hará así."
Eliza Doolittle, Pygmalión de G. B. Shaw

Ahí está la base de todo. Lo que hemos hecho y hasta dónde hemos llegado. De eso se trata de ser una florista, o de ser una señora, o de ser una señora florista. De creer lo que eres. De saber lo que eres y, también, que puedes ser de otra manera. Que lo que hemos aprendido se desaprende, que la mejor razón para hacer algo es porque me apetece, porque quiero, porque merece la pena... Que no voy a saber quién eres hoy por todo lo que me cuentas de ayer. Que no vas a saber quién era ayer por todo lo que te cuento de ayer. Porque, además, todo te lo cuento según yo creía que era... y a lo mejor no es coincidente.

1 comentario:

aniestramalefikariums dijo...

ME ENCANTO!
Que no voy a saber quién eres hoy por todo lo que me cuentas de ayer.

Me gusta porque a pesar de ser corto dice todo lo que tiene que decir..

chau,anne