Otra vez será... o no... o de cómo nos cambió el año nuevo
Ayer salí de fiesta por la ciudad. "Vamos a echar una cerveza y luego ya veremos" En fin, la frase de siempre. Una cerveza (y eso que yo nunca bebo cerveza), un chupito, un martini, otro y otro... En fin, que perdí la cuenta (y creo que mi estómago agradeció que perdiera la cuenta y las ganas de seguir bebiendo)... pero no la cabeza, lo cual tampoco está mal.
La ventaja de emborracharse poco es observar al mundo... Desde la última vez que salí por aquellos lugares esa gente ha cambiado. No sé qué les ha pasado (ni tampoco lo sabré) pero parece que el nuevo año trajo a todos espiritualidad y concentración... "Me he convertido en aquello que querías que fuera".... y yo con los ojos como platos... ¿Por qué la gente cambia para convertirse en cosas que ni siquiera quieren ser? ¿Sólo por otra persona?... Lo dicho que he debido de enclaustrarme tanto que la luz me ha cegado... me sentí tan perdida....
La ventaja de emborracharse poco es observar al mundo... Desde la última vez que salí por aquellos lugares esa gente ha cambiado. No sé qué les ha pasado (ni tampoco lo sabré) pero parece que el nuevo año trajo a todos espiritualidad y concentración... "Me he convertido en aquello que querías que fuera".... y yo con los ojos como platos... ¿Por qué la gente cambia para convertirse en cosas que ni siquiera quieren ser? ¿Sólo por otra persona?... Lo dicho que he debido de enclaustrarme tanto que la luz me ha cegado... me sentí tan perdida....
La foto está sacada de blogadorn
No hay comentarios:
Publicar un comentario